En 2011 llega el fin del estatuto del refugiado para los ruandeses. Una ofensa para sus asociaciones
(Fundación Sur. Departamento África, 15 de junio de 2011)
Estas asociaciones consideran que la suspensión de la protección a los refugiados ruandeses es “extremadamente prematura” ya que, señalan, “las condiciones que llevaron a los ruandeses al exilio están lejos de acabar y en algunos ámbitos incluso han empeorado”.
Entre estos aluden a los rencorosos discursos del presidente Kagame, en el encuentro con refugiados del 13 de abril de 2010, cuando comparó a los ruandeses que huían del país como “excrementos” que el cuerpo rechaza automáticamente.