jueves, 11 de junio de 2009

El TS concede el estatus de refugiada a una nigeriana residente en Valencia que sufrió la ablación del clítoris



(Europa Press, 22 de mayo de 2009)


Su padre la entregó en matrimonio a un vecino que disfrutaba de una posición económica más holgada, para lo cual le fue practicada una ablación de clítoris, pero la joven escapó a España
El Tribunal Supremo ha concedido la condición de refugiada a una joven nigeriana, residente en Valencia, que se vio obligada a huir de su país después de que le practicaran la ablación del clítoris para casarla con un vecino musulmán mucho mayor que ella.
Según el relato de la joven Bola Olugbenga, reflejado en la sentencia, su padre la entregó en matrimonio a un vecino de religión musulmana, que disfrutaba de una posición económica más holgada que la de su familia. Con la finalidad de formalizar el matrimonio, le fue practicada una ablación de clítoris, tras lo cual escapó a España. En la actualidad reside en Valencia, donde mantiene una relación de pareja.
El Ministerio del Interior le denegó su petición de reconocimiento de la condición de refugiada, negativa que fue confirmada por la Audiencia Nacional debido a que "no aportó documentos acreditativos sobre su identidad" ni suficientes pruebas o indicios que acreditaran que había sufrido persecución. No obstante, se le concedió una autorización para permanecer en España por razones humanitarias.
La sentencia del alto tribunal hace referencia a un informe del Alto Comisionado de la ONU para los refugiados (Acnur) que refleja que el Código Penal nigeriano establece explícitamente que la violencia ejercida por un hombre dentro del matrimonio no constituye una ofensa si está permitido por la costumbre.
Acnur recuerda que, a pesar de que la mutilación genital femenina ha comenzado a descender en este país, la práctica sigue siendo común en las áreas rurales y entre las etnias edo -a la que pertenece Olugbenga- y urhobo.
La Sala de lo contencioso-administrativo considera suficientemente acreditados los hechos que expuso la refugiada como causa de su salida de Nigeria, que reflejan "un contexto familiar y social en el que se le obligó a someterse a esta bárbara práctica", y considera que hay indicios suficientes para decidir que la joven sufría en su país "una persecución por su pertenencia al género femenino que la impuso un matrimonio no deseado y le mutiló un órgano genital", motivo por el que le concede la condición de refugiada.

No hay comentarios:

Publicar un comentario