M. Á. Montero.
(ABC, 25 de junio de 2011)
Los canarios hacen las maletas cada vez en mayor número: la crisis socioeconómica así lo obliga en muchos casos, sobre todo cuando de jóvenes en busca de un futuro laboral se trata. Porque España sufre una de las tasas de paro juvenil más altas de Europa, pero las islas aún la empeoran, con lo que se sitúan a la cola de la cola. Ello explica, al menos en buena medida, por qué los isleños residentes en el extranjero son hoy casi un 50% más que allá en octubre de 2007, cuando los expertos coinciden en señalar el estallido de las estrecheces. Y es que, por entonces —exactamente a 1 de octubre de 2007 y según los datos del Censo de Españoles Residentes en el Extranjero (CERA)—, eran 70.160 los ciudadanos del Archipiélago emigrados, de los cuales 15.941 eran de la provincia de Las Palmas y 54.221, de la de Santa Cruz de Tenerife. A fecha del último 1 de mayo, es decir, hasta donde alcanza la serie histórica del CERA, los canarios registrados en el censo que elabora el Instituto Nacional de Estadística eran ya, sin embargo, más de 100.000; en concreto, 103.134, de los cuales 27.391 corresponden a la demarcación de las islas orientales y el resto, 75.743, a la de las islas occidentales. De modo que el incremento del número de emigrados, y ello solo considerando aquellos reconocidos en el CERA, es de 32.974 personas; en términos exactos, un 47% más.
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